martes, 22 de febrero de 2011

Si me sobrara un kilo de amor...

¿Odio o amor? Yo escogí el amor. Un día me levanté por la mañana, muy temprano y me dí cuenta que me sobraba un kilo de amor y que otras personas, como los que están en un orfanato o los que no tienen hogar, etc... seguro que necesitan un poco de amor, a si que, lo metí en una mochila y me fui a Plasencia para coger el tren, irme a Madrid, coger un avión y recorrer el mundo. Primero fui a  África, allí me encontré niños sin familias, también a miembros de una ONG y los pedí ser componente de ella. Estuve con ellos días y días repartiendo gramos de amor, mi mochila estaba un poco vacía, a si que volví a España y visité a unos ancianos sin familia y las dí diez gramos de amor a cada uno, me lo agradecieron con una sonrisa, después me despedí de ellos y salí a la calle, me encontré con un perro abandonado y triste, le dí al él también, pues los animales también lo necesitan y por último me acordé de mi amigo Daníl y sus compañeros que están en un orfanato en Rusia, a si que me desplacé allí a repartir todo el amor que me quedaba en la mochila. 
Volví a casa a por más amor y pensé que si se pudiera sembrar todo el mundo recibiría amor.

                                                                                                                                   
                                                                                                                             ISMAEL

2 comentarios:

  1. Me encanta tu redacción.Gracias por escribirla y compartirla

    ResponderEliminar
  2. Eres un pozo sin fondo, Ismael. Una redacción preciosa, gracias por compartirla

    ResponderEliminar